El alza de precios de los materiales de construcción ha afectado negativamente al sector. El incremento en el costo de los proyectos ha llevado a un decrecimiento importante en la compra de vivienda nueva.

Durante el primer trimestre del 2023 el alza de precios en los materiales de construcción ha sido tema frecuente. Es parte de las causas de la fuerte caída en las ventas de vivienda nueva.

De acuerdo con el último informe sectorial de Bancolombia, en lo que atañe a la construcción, la caída es del 61.4%

La Cámara Colombiana de la Construcción, CAMACOL, valida estas cifras y destaca que son las peores en la historia de la venta de vivienda en Colombia.

Pero el aumento de los precios de los materiales de construcción no se debe al azar o al afán de los productores y fabricantes de enriquecerse.

La fijación de un precio de venta es un proceso complejo que involucra varios factores. Están los internos del fabricante, que debe cubrir costos de producción, salarios de su planta de personal y generar una rentabilidad que le permita ser un negocio viable.

Por otra parte están los factores externos, fuera del control del fabricante, que son los que más afectan los precios de venta.

Por eso hoy queremos compartirte 7 factores externos que han influido de manera importante en el alza de precios de los insumos para la construcción.

1. Cierre de empresas productoras de insumos.

No es un secreto que una de las más graves consecuencias del confinamiento, generado por la pandemia de COVID 19, fue el cierre de miles de empresas.

Dentro de ellas, varias empresas productoras de insumos alrededor del mundo tuvieron que cerrar sus puertas.

El cierre de las plantas productoras generó escasez de productos que, con una demanda igual o mayor, genera especulaciones en los precios.

Muchos productos para construcción, como cemento, pinturas, masillas, acero y cristalería, así sean de producción nacional, requieren materias primas importadas.

Lo anterior obliga a los productores locales a ajustar sus precios, en aras de mantener niveles de rentabilidad que les permitan ser viables.

2. La tasa de cambio ha impulsado el alza de precios

De acuerdo con información el Banco de la República, a 31 de diciembre de 2022 el peso colombiano cayó un 20.82% frente al dólar. De hecho, es una de las monedas más devaluadas de Latinoamérica.

Esto ha afectado de manera importante los productos para la construcción. Buena parte de ellos requieren materia prima importada para su elaboración.

A una tasa de cambio más alta, es muy difícil sostener precios, ya que los costos de producción se incrementan al ritmo del incremento del precio del dólar.

Productos como el acero, uno de los más afectados durante el 2022, incrementaron su precio entre el 25% y el 40%.

En el caso de materiales como enchapes, sanitarios, grifería y carpintería, aunque cuentan con producción nacional, esta no es suficiente, por lo que deben importarse.

3. La guerra en Ucrania

El 24 de febrero de 2022 estalló el conflicto bélico entre Ucrania y Rusia. Esta situación le dio una nueva estocada a la economía mundial, afectada de manera importante por la pandemia.

Materiales como el aluminio, el cemento y la cerámica han sufrido un alza de precios importante debido a la guerra.

Buena parte del aluminio viene de Rusia, por lo que el bloqueo económico que han implantado Estados Unidos y la Unión Europea han hecho que se produzca desabastecimiento.

Como lo hemos mencionado anteriormente, cuando baja la oferta y la demanda se mantiene, el efecto sobre el precio es al alza.

4. La carga tributaria

Colombia es uno de los países con las tasas impositivas más altas para las empresas. De hecho, sumando los diferentes impuestos, la carga tributaria ronda el 65%.

Una empresa en Colombia debe pagar impuestos nacionales, departamentales y municipales. Esto hace que el precio final de un material se vea afectado.

A nivel nacional una empresa debe pagar un 35% de impuesto a la renta, más un 19% de impuesto al valor agregado (IVA), un 0,4% de todo movimiento financiero y un 4% de impuesto de telecomunicaciones.

Los impuestos departamentales rondan entre un 0,3% y un 0,7% sobre contratos que deban registrarse ante la Cámara y Comercio.

A nivel municipal se paga el impuesto de Industria y Comercio o ReteICA, que se calcula dependiendo el monto de las ventas.

Finalmente, algunas empresas deben pagar entre 0,5% y 1.5% de impuesto al patrimonio, si sus activos (bienes y derechos) son superiores a $2.376 millones.

5. Alza de precios de materias primas

Como lo hemos mencionado anteriormente, buena parte de los materiales que se utilizan en construcción requieren de materias primas que se importan de otros países.

El efecto de la tasa de cambio afecta el precio al que los fabricantes traen estos productos a Colombia.

Sumado a lo anterior, hay que tener en cuenta las tarifas arancelarias. Los aranceles son los derechos de aduana que se aplican a los productos importados.

Esto ha afectado principalmente al cemento, yeso, acero, hierro, vidrio, cerámicas, pinturas, masillas y barnices.

6. Tarifas de energía

De acuerdo con datos del Departamento Administrativo Nacional de Estadística (DANE), durante el año 2022 el alza de precios en el sector energético fue de 22,4%.

Aunque el gobierno ha planteado en diferentes ocasiones la necesidad de disminuir las tarifas, esto no se ha logrado.

Uno de los efectos generados por este incremento es el aumento del IPP (Índice de Precios del Productor), que para el 2022 fue de 21,8%. Esta cifra es bastante alta si se compara con el 13.12% de inflación.

7. Incremento en el precio de la gasolina

Para todos es claro que cuando sube el precio de la gasolina, suben los precios de varios artículos y productos.

El más directamente afectado es el transporte, tanto de carga como de pasajeros. Vale la pena recordar que en los últimos meses el alza de la gasolina ha sido del 20,5%.

Adicionalmente se espera que en los próximos meses suba un 45% más, lo que dejaría el precio por galón cercano a los $16.000.

En resumen, el alza de precios en los materiales utilizados para la construcción no depende de hechos fortuitos o decisiones caprichosas.

Todo un andamiaje de factores, de los que hemos mencionado los más importantes, afectan el precio final de un producto.