Quien incumpla contratos de construcción de obra por el uso de materiales de mala calidad puede ser castigado hasta con 12 años de cárcel.

Esta semana la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) determinó la constitucionalidad de una parte del Código Penal Federal que castiga con penas de hasta 12 años de prisión a aquellos contratistas que incumplan sus contratos de construcción de obra utilizando materiales inferiores en calidad y/o cantidad a los estipulados dentro del mismo. Esta conducta será tipificada como fraude por las autoridades mexicanas.

La anterior determinación fue tomada a raíz de un proceso que se lleva contra el empresario de la construcción Víctor Hugo Caram González, dueño de la empresa Constructepue de México S.A de C.V., quien obtuvo contratos de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes para modernizar varias carreteras, por cerca de 32 millones de dólares. Posteriormente, la Auditoría Superior de la federación encontró irregularidades en cuanto a calidad de los insumos en varios contratos, por lo que el empresario deberá devolver al erario cerca de 1.5 millones de dólares.

“Al no cumplir con lo pactado y existiendo una relación causal entre la conducta desplegada y el lucro obtenido por el sujeto activo, en detrimento del patrimonio del contratante, se configura la hipótesis de fraude específico” señala la sentencia.

En concordancia con lo anterior, la diputada del PRI Claudia Delgadillo está impulsando un proyecto de ley para modificar el artículo 252 del código penal de Jalisco, que se refiere al uso de materiales de construcción de dusosa calidad, para que se tipifique como un delito de fraude i de una pena de cárcel de hasta 16 años.

La parlamentaria argumenta que si se llegase a presentar un sismo o de manera espontánea llegase a colapsar la totalidad o parte de la construcción y esto se relaciona con uso de materiales de mala calidad, se aplicaría a los consructores la máxima pena.